¿Quién se lanza al vacío con el barbijo?, se preguntó Jorge Valda, el abogado de la familia del interventor Carlos Alberto Colodro, al cuestionar la hipótesis del suicidio sostenida por el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.

Valda fue uno de los primeros en ver el cuerpo de Colodro, tendido de cubito ventral, es decir, boca abajo, al pie del Edificio Ambassador Business Center donde hasta antes de la intervención funcionaban las oficinas de los ejecutivos del Banco Fassil.

Valda asegura haber visto en el pecho de Colodro “signos, señas y escrituras a tinta” de unos 30 cm, además de perforaciones en el cráneo y heridas cortantes en el rostro y otras partes del cuerpo, y que no contaba con el ojo derecho ni un testículo.

Jorge Valda, abogado de la familia de Carlos Alberto Flores asegura que Colodro fue asesinado con tortura previa “Fue un asesinato con tortura, al estilo de la mafia organizada” , concluyó Valda.

Rodrigo Valdez, médico general, esa misma noche, la del 27 de mayo, se encargó de la autopsia a pesar de no tener la indispensable especialidad forense. A las 7 de la mañana del domingo 28, el Dr. Valdez concluyó que Colodro se suicidó lanzándose del piso 15 y que las heridas que presenta el cuerpo son resultado del impacto de la caída, “politraumatismo por precipitación”, impacto que también habría destrozado el celular de Colodro. Valdez no vio nada de lo descrito por Valda, ni siquiera que le faltaba un ojo, un testículo y que tenía un mensaje a tinta en el pecho.

LA CARTA

Al mediodía del 28 de mayo el Ministro del Gobierno, Eduardo del Castillo, dio a conocer la presunta carta póstuma de Colodro, el interventor que permaneció apenas 32 días en ese cargo y quien supuestamente encabezó sus palabras de despedida con letras mayúsculas diciendo: “ME ENGAÑARON. ME DIERON LA ESPALDA”. Estas dos afirmaciones llevan a una tercera frase a modo de conclusión: “ME MATARON”.

Primera carilla de la supuesta carta póstuma de Colodro.

Esta nota póstuma con fecha del 27 de mayo fue redactada a mano con un bolígrafo azul en dos carillas de una misma página que no fue arrancada del cuaderno con espiral de hojas cuadriculadas que llevan en cada una de ellas el membrete de la ASFI, la entidad para la que trabajaba Colodro y que presuntamente lo habría “engañado y dado la espalda”.

La carta lleva una rúbrica y una anotación final: “Sábado lluvioso”. Según la mujer de Colodro, no es su letra ni su firma. Tampoco coincide la edad a la que se se hace referencia “… en esta vida que me recibió por 64 años”, pero resulta que Colodro tenía 63 y le faltaban más de siete meses para cumplir los 64. Por lo tanto, concluye la familia y su abogado , esa carta póstuma es apócrifa.

Comparación de las firmas: Colodro fue gerente del Banco Central de Bolivia
y por ello su firma aparece en los billetes de 20 Bs.

El cuaderno y el bolígrafo de tinta azul no estaban en la sala de reuniones, la sala con el balcón desde donde Colodro inicio su descenso a la muerte.

Según el abogado Jorge Valda , cuando la policía, el fiscal y su persona ingresaron a ese salón estaba completamente vacío, con muebles, claro, pero nada más.

Entonces, ¿de dónde obtuvo el ministro del Castillo esa carta que probaría el suicidio? No hay respuesta.

Tras la intervención al Banco Fassil, todos los documentos y computadoras fueron trasladados a otro edificio llamado “Manzana 40”.

LAS HORAS PREVIAS

Pie de foto: Unitel publicó la imagen de Colodro captada por una cámara de seguridad caminando en el centro de Santa Cruz antes de ingresar al Ambassador.

Colodro en el centro de Santa Cruz horas antes de ingresar al Ambassador

Carlos Alberto Colodro y todo su equipo de auditores de ASFI encargados de la intervención al Banco Fassil trabajaban en las oficinas del “Manzana 40” y, por razones de seguridad, todos ellos han estado alojados en un mismo hotel. Colodro se movía de un lugar a otro acompañado de cuatro guardaespaldas.

Pero justo ese sábado 27 de mayo, estaba solo sin nadie que lo acompañe. Siendo el Día de la Madre, almorzó con su hija y no con su mujer y madre de sus tres hijos.

A las 17:40 sin motivo aparente llegó al Ambassador, un edificio con la fachada de vidrio en Equipetrol, la zona comercial de Santa Cruz.

El imponente edificio Ambassador Business Center de Santa Cruz
donde funcionaban las oficinas del Banco Fassil

EL NOVATO GUARDIA DE SEGURIDAD

Allí se cruzó con un guardia de la empresa “Tigres Cruceños ” que está a cargo de la seguridad del edificio. Para el guardia era su primer día de trabajo y para Colodro las últimas horas de su vida.

El guardia dijo en una entrevista que permaneció hasta la hora de la tragedia en la recepción del piso 15 y que Colodro salió de la sala de reuniones dos veces para ir al baño. En una segunda entrevista dijo que lo vio “nervioso”, sin aclarar qué hizo Colodro para demostrar su nerviosismo.

El guardia nunca aclaró si habían otras personas en esa sala de reuniones, alguien que hubiera podido empujar a Colodro a través del balcón, o si Colodro estaba solo como se supone. Tampoco reportó ruidos extraños o gritos.

SIN INDICIOS DE VIOLENCIA

El hecho es que la policía, el fiscal y Jorge Valda ingresaron a ese salón, luego de hallar el cuerpo de Colodro al pie del edificio, y no encontraron nada que ayude a esclarecer la muerte del interventor de Fassil, los muebles estaban en orden y no había rastros de pelea ni de sangre, por lo menos no a simple vista.

TRES HORAS EN UNA SALA VACÍA

¿Qué hizo Colodro en esa sala vacía durante casi tres horas, de 17:40 a 20:15?

Posiblemente alguien lo citó y él esperó. O simplemente fue a pensar qué iba hacer con su vida y con las fuertes presiones que recibía, presiones que lo llevaron a comentar a sus compañeros de trabajo que estaba pensando en renunciar.

A las 18 horas habló con su mujer, no se aclaró aún quién de los dos llamó pero conversaron. En el almuerzo, él le había prometido a su hija que iría a su domicilio “más tarde”.

Si Colodro fue torturado como afirma Valda no fue en esa sala de reuniones porque no hay sangre ni huellas de un acontecimiento de violencia de esa magnitud.

Además, es difícil torturar sin mover el barbijo que acompañó a Colodro en su descenso fatal.

Imagen de la cámara de seguridad dentro de la sala de reuniones.
Colodro camina de un lado a otro.

Hay quienes afirman que la tortura ocurrió días antes y en otro lugar. Imposible. El video de una cámaras de seguridad ubicada en la sala de reuniones muestra a Colodro caminando de una lado a otro como un león enjaulado , está de cuerpo entero, con camisa amarilla y el barbijo a la altura del cuello. ¿Qué pensaba, en matarse? ¿Había ido a esas solitarias oficinas con ese propósito?

LA PREMURA DEL GOBIERNO

El gobierno de modo apresurado, adelantándose a la Fiscalía y a solo tres días de la muerte de Colodro, ya cerró el caso declarando que fue un suicidio.

Ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, decidió  que fue un suicidio
sin esperar la conclusión  de las Investigaciones.

No hay duda que ante tantas dudas se requiere de otra autopsia, una profesional y detallada que confirme o descarte la tortura denunciada por la familia de Colodro y su abogado, Jorge Valda.

Así también se está a la espera de la revisión de un testimonio digital. Se trata del video de una cámara de seguridad que enfoca directamente al balcón del piso 15 que develará si Colodro saltó por su propia cuenta o lo empujaron.

HOMICIDIO – SUICIDIO

A su vez la Fiscalía que por el momento de modo sorprendente no sigue las pautas del ministro del Castillo, recién abrió la Investigación por homicidio-suicidio que quiere decir que alguien o algunos presionaron a Colodro para que haga o deje de hacer algo, usando amenazas o extorsión, hasta que la víctima no encontró otra salida que el suicidio. Es decir, lo obligaron a matarse. ¿Quién o quiénes?, esa es la cuestión.

OTROS COMO COLODRO

La muerte de Carlos Alberto Colodro se suma a otras igual de extrañas ocurridas este año.

El 2 de mayo de este año, Christopher Balcázar, abogado del gobernador de Santa Cruz, también cayó del piso 11 del edificio donde vivía, ubicado en el segundo anillo de Santa Cruz.

Cinco meses atrás, el 20 de enero, murió en Miami Felipe Sandy Rivero, el testigo clave de las coimas en la ABC quien tuvo que salir del país por las amenazas de muerte que recibía. Pero, ni en los Estados Unidos se libró de la parca. Su desaparición ayudó a la Fiscalía a cerrar este caso de corrupción y absolver a los 12 implicados.

Christopher Balcázar y Sandy Rivero

LA SALA DE LOS ENJUAGUES

En esa misma sala donde Colodro pasó sus últimas tres horas, sobre esa misma mesa de reuniones, los siete directores del Banco Fassil, encabezados por Ricardo Mertens, se hicieron de dietas millonarias. Por ocho reuniones al mes cobraban 45 mil dólares, más otros 60 mil si también eran directores de “Santa Cruz Financial Group”, la Sociedad que controlaba el 40 % de las acciones de Fassil.

Ricardo Mertens

Allí también se aprobaron los créditos vinculados que llevaron a Fassil al desastre financiero. Los mayores “créditos” de un total de 50 se entregaron a siete empresas que recibieron 219 millones de dólares, dinero de los ahorristas que hoy claman por la devolución de su dinero.

La Unidad de Investigaciones Financieras, UIF, identificó que estas empresas luego de cobrar esos millones inmediatamente los depositaban en la cuenta de ahorro No 324531 del Banco Fassil que corresponde a “Santa Cruz Financial Group”, es decir, a ellos mismos.

A su vez “ Financial Group” derrochaba como quería sin ningún control. Por ejemplo tenía entre manos financiar con 4.500 millones de dólares la construcción de La Nueva Santa Cruz, en sociedad con un novísimo empresario, Julio Novillo.

Lo demás, aunque sospechoso son pequeñeces, como los préstamos de uno o dos millones de dólares a jovenzuelos menores de 20 años sin ningún respaldo crediticio quienes, sin embargo, devolvieron en cuestión de meses tanto el capital como los intereses. Parecen ser, tal vez no todos, créditos destinados a la exportación de la línea “blanca”.

¿Y DÓNDE ESTÁ EL PILOTO?

Los ahorristas del intervenido Banco Fassil podrán retirar sus ahorros sólo en bolivianos.

La Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero, ASFI, que por ley debió evitar o al menos sancionar a tiempo esta dolosa práctica de los créditos vinculados, NO HIZO NADA.

14 BANCOS LIQUIDADOS

Los créditos vinculados se llevaron por delante a 14 bancos entre los años 1987 a 1999. Entre ellos al Bidesa, Bancos La Paz y Cochabamba, BBA, Banco Minero y al Agrícola. Este último fue disuelto en 1991 por el alto grado de morosidad, el 90 % de los créditos irrecuperables pertenecían a la agroindustria cruceña.

El Banco Central de Bolivia tuvo que pagar a los ahorristas de todos esos bancos más de 600 millones de dólares y recuperó vendiendo activos apenas 200 millones de dólares.

COMO OLVIDAR EL ASESINATO DE ARÉVALO

También se arrastra la experiencia de la financiera FINSA de los hermanos Arévalo que pagaban altas tasas de interés y con ello lograron captar 56 millones de dólares en una pirámide que se vino abajo en 1991 dejando pelados a 30 mil ahorristas y muerto de varios tiros a Nelson Arévalo, un crimen que nunca se esclareció.

FINSA captó el dinero de los mineros relocalizados.
Estafó a 30 mil ahorristas, la mayoría de Cochabamba.

Con estos antecedentes hay una corresponsabilidad de la ASFI y los ministros de Finanzas en el derrumbe de Fassil.

La pregunta que aún no tiene respuesta es ¿por qué la ASFI no hizo su trabajo, por qué dejó correr semejante estafa?

Hago notar que el gobierno intenta tapar su responsabilidad manipulando la información. Ha difundiendo sólo los datos a partir de enero de 2018 a mayo de 2021. Pero ¿qué hay de los créditos entregados durante este gobierno? . Esa información la mantienen en reservada.

¿QUIÉN MATÓ A COLODRO?

Carlos Alberto Colodro, 63 años, fue gerente del Banco Central de Bolivia, autoridad en ASFI e Interventor por 32 días en el Banco Fassil

El gobierno, sus voceros y sus diputados apuntan el dedo a los empresarios, todos cruceños.

¿Qué podrían ganar estos empresarios, fundidos como están?

LOS EMPRESARIOS

Antes del 27 de mayo, la lista de los 50 empresarios estaba publicada gracias a que el gobierno se la hizo llegar a un periodista de su confianza.

Los cuatro directivos del Banco Fassil detenidos en Palmasola

Asimismo cuatro de los directores y una gerente que manejaron Fassil ya están presos y en evidencia. Fassil ya cayó en desgracia y está intervenida por el Estado. No pueden ocultar ninguna de sus fechorías porque ASFI tiene toda la documentación a su disposición.

¿Para qué entonces matar a Colodro? Aquel que redactó la carta póstuma, apócrifa o no, no menciona a los empresarios. Apunta más bien al gobierno.

USO POLÍTICO

Desde Santa Cruz políticos y periodistas han expresado que el gobierno podría usar el caso Fassil para perseguir y extorsionar a dirigentes del Comité Cívico y otras figuras regionales, como lo hicieron con el Caso Terrorismo que también tuvo sus muertos, tres asesinatos no esclarecidos, entre ellos el de Rózsa Flores.

Una persecución con el pretexto de Fassil sí es posible. Hacerse de Santa Cruz es la estrategia clara, clarísima del MAS, de Evo y de Lucho. Y empresarios corruptos como los que se aprovecharon de Fassil, que solitos cavan su propia tumba, le facilitan al gobierno avanzar en su estrategia.

OTRO SOSPECHOSO: EL GOBIERNO

Desde las redes sociales se lanza otra versión que apunta más bien al gobierno como el principal interesado en acallar a Colodro.

Se dice que el gobierno pretende impedir que se conozcan los datos de los créditos vinculados entregados durante la gestión del presidente Arce. Podrían aparecer amigos y parientes. Y también existe la posibilidad que detrás de los dueños legales de Fassil existan otros, los verdaderos, vinculados al actual gobierno. De ésto solo hay rumores. Sin embargo, como dijo el Comandante de la Policía, no se puede descartar ninguna hipótesis.

Como sea, Colodro tenía una información que le costó la vida.

La segunda parte de la  presunta carta póstuma de Colodro

Ya sea que lo empujaron desde aquel balcón del piso 15 o que él solito saltó tras haber vivido bajo una presión extrema durante 32 días que le parecieron 100 años en el infierno, da lo mismo, lo mataron.