La Cancillería peruana envió una nota al embajador de Bolivia en el Perú, Carlos Aparicio, mediante la cual transmite una “enérgica protesta” por las declaraciones del presidente de dicho país, Luis Arce, sobre temas de política interna.

Mediante sus redes sociales, Torre Tagle anunció también que evalúa acciones ante nuevos actos de injerencia.
El último fin de semana, Arce se refirió a la crisis social que vive el Perú. Afirmó que los grupos de derecha pretenden desestabilizar a su país, al Perú y a otras naciones latinoamericanas.

“Tenemos al pueblo peruano en una lucha por recuperar su democracia y también por recuperar el derecho a elegir un Gobierno que los represente”, expresó en un evento de su partido.

Como se recuerda, el pasado 9 de enero, la Superintendencia Nacional de Migraciones ordenó el impedimento de ingreso al país del ciudadano boliviano Evo Morales, expresidente del país del Altiplano, y líder del partido de gobierno.

Ello luego de que se revelara que el expresidente de Bolivia y doce de sus operadores habían ingresado al Perú para difundir su discurso político.

Rechazan expresiones de Arce y Petro

Minutos antes de que el Ministerio de Relaciones Exteriores informara sobre la nota de protesta por las expresiones de Arce, los congresistas María del Carmen Alva (Acción Popular), Jorge Montoya (Renovación Popular), José Arriola (Acción Popular) y Luis Alegría (Fuerza Popular) rechazaron las declaraciones del gobernante boliviano y del presidente de Colombia, Gustavo Petro, sobre la crisis en el Perú.

Asimismo, demandaron medidas más firmes de la Cancillería.

Alva, quien es presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso, recordó que el pasado 28 de diciembre, el pleno aprobó una moción de rechazo a la “intromisión” del presidente Petro.

El documento aprobado por el Parlamento proponía instar a la Cancillería peruana para que eleve esta moción al representante de la embajada colombiana en Perú.

Dicha iniciativa fue presentada luego de que el mandatario colombiano solicitara que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos aplique medidas en favor del vacado expresidente Pedro Castillo.


La presidenta del grupo de trabajo destacó que cuando la ministra Ana Gervasi asistió a la comisión se le instó a adoptar una postura “más fuerte” ante estos actos de intromisión y que corresponde a su cartera tomar medidas.

Asimismo, dijo que espera que la moción para declarar persona non grata a Evo Morales sea puesta en la agenda del pleno esta semana y aprobada en esa instancia.

“Si bien no es el presidente formal, es el que dirige a Arce ... El tema con Bolivia ya pasó de castaño claro a oscuro, hay que ser más fuertes con ellos. Lo que sigue con Bolivia es que ya no haya embajador acá. Creo que la Cancillería debe darle un ultimátum a este país”, expresó la legisladora de AP.

Por último, indicó que la ministra de Relaciones Exteriores debe dialogar con sus pares de Colombia y Bolivia.

Por su parte, Montoya consideró la Cancillería debería tomar medidas drásticas ante los actos que calificó de “intromisión en los asuntos internos del país”.

“Yo retiraría al embajador de Bolivia y al encargado de negocios de Colombia”, aseveró el vocero de Renovación Popular.

Una opinión similar tuvo José Arriola. “Lo mismo que se hizo con el embajador de México se debe hacer con los representantes diplomáticos de Bolivia y Colombia”, dijo.

Luis Alegría, vocero alterno de Fuerza Popular, indicó “que se debe una tomar una postura clara frente a estas injerencias”.

“Debemos dar una muestra de que queremos una Cancillería fuerte que no permita que otros países metan sus narices en las decisiones que solo le compete al Estado peruano”, apuntó.

¿Qué acciones podría tomar Cancillería?

El exministro de Relaciones Exteriores Luis Gonzáles Posada consideró que la Cancillería debería mostrar una posición “más firme” respecto a los casos de Petro y Arce porque - a su criterio - estos mandatarios con sus mensajes “no solo están interfiriendo en asuntos internos, sino que azuzan a la población”.

Una de las medidas, según Gonzáles Posada, sería declarar al embajador de Bolivia y al encargado de negocios de Colombia personas non gratas, como ocurrió en el caso de Pablo Monroy, el embajador de México en el Perú, a quien se le aplicó esta medida en diciembre debido a los dichos del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Otra medida, dice el excanciller, es pedir una reunión con el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos para exponer ante los países miembros lo que está sucediendo.

“Noto una Cancillería débil que mantienen en sus puestos a embajadores que 17 meses sirvieron al gobierno de Castillo. Es gente que en ese largo periodo no dijo nada sobre los actos de corrupción. Hay una línea de continuidad que no se ha roto. Hay radica la debilidad de la Cancillería”, afirmó.