La revancha entre Bolívar y Oriente Petrolero por las semifinales del Torneo Apertura tuvo un sinfín de emociones y polémicas, la noche del jueves, en el estadio Hernando Siles de La Paz. La tensión por el encuentro continuó en los camerinos e incluso afuera del escenario deportivo.

Los jugadores y miembros del cuerpo técnico del club refinero denunciaron amedrentamiento por parte de integrantes de Bolívar, mientras que estos negaron las agresiones verbales y, por el contrario, reclamaron que gente del equipo rival intentó ingresar a sus vestuarios.

En medio del cruce de acusaciones, hubo amagues de peleas, gasificaciones de efectivos de la Policía y declaraciones polémicas del cuerpo técnico de Oriente.

“Siento vergüenza de ser boliviano”, soltó el entrenador albiverde, Erwin “Platini” Sánchez, en una transmisión de Máquina Deportes. “No quiero decir nada más”, agregó el exmundialista.

Cuando los periodistas le preguntaron las razones de sus declaraciones, el DT alzó la voz: “¡Cómo que por qué!”.

Luego, “Platini” se retiró del lugar sin dar mayores explicaciones, mientras continuaba la refriega en puertas del estadio Hernando Siles. Los jugadores reaccionaron ante insultos de hinchas de Bolívar y la Policía tuvo que intervenir, incluso activando agentes químicos.

“Nos están provocando”, gritaban los jugadores, al intentar rebasar a policías para enfrentarse con los hinchas. Finalmente, afectados por el gas lacrimógeno, los futbolistas abordaron su bus y salieron de la zona.

EL DESCARGO DE "PLATINÍ"

El técnico de Oriente Petrolero, Erwin Sánchez, se sinceró en su página oficial de Facebook, sobre lo ocurrido anoche en La Paz ante Bolívar.

-"Siempre voy a estar orgulloso de ser boliviano, lo he demostrado como jugador y también como entrenador con los principios por delante siendo hombre de palabra.

La vergüenza a la que me refiero es a la cobarde operación y maniobra con la que se gestiona el fútbol. Me avergüenzo como boliviano, la realidad que atraviesa este deporte en nuestro país.

Partidos como los de anoche deberían ser administrados por árbitros con insignia FIFA. Hicimos la sugerencia y no prosperó y no va a prosperar nunca porque todo es una chicana. El fútbol que defiendo no es parcializado, siempre busca premiar el mérito antes que la ventaja política, pero seguimos luchando con chicanas, maniobras y operaciones en vez de atender la evolución del fútbol, incorporar tecnología, armar equipos de gestión profesionales y competentes, internacionalizar nuestra respuesta competitiva de fútbol en Bolivia.

Ningún boliviano merece ser discriminado, nos vienen dividiendo para tapar la verdad, porque el nivel de nuestro torneo cada vez está peor en cancha como en organización. Tratar de esa manera al presidente de un club que fue capitán más de diez años en la selección, no tiene argumentación.
Lo que hicieron en camerinos de tirar la piedra y esconder la mano fue indignante. Existen medidas Conmebol para tratar a un equipo visitante, estas normas fueron violadas. Ninguna institución merece ser tratada así, lo digo para generar unión.

Un extranjero siempre debe mostrar respeto con el país y toda su cultura, como bolivianos no podemos dejarnos con quienes se creen dueños de la verdad.

Quiero agradecer todo el apoyo de la familia Orientista, sabíamos que no solo jugamos contra los que hay en cancha. No le daré el gusto a los mediocres, sé que les duele vernos crecer. Seguiré trabajando por estos colores, como por nuestro futbol boliviano".