“Todo apunta a que Bolivia está en pleno proceso de transformación de las Fuerzas Armadas (FFAA) para convertirlas en un brazo de apoyo al modelo que quieren construir”, manifestó a Página Siete Digital la historiadora y analista político venezolana Margarita López Maya, en referencia a las reformas que planteó el Movimiento Al Socialismo (MAS) sobre la institución castrense.
La anterior semana, la Cámara de Diputados aprobó la Ley de Ascensos de las FFAA, de la cual se observa que la reglamentación estará sólo a cargo del Gobierno y que hay una modalidad de promociones por movilización. Además, que militares bolivianos instruidos fuera del país también podrán acceder a altos mandos.
A esto se suma que el martes el oficialismo intentó dejar de lado a los militares graduados entre 1987 y 1988 y ascender a uniformados de 1989 y 1990, ante denuncias de irregularidades en el proceso de calificación. No lo lograron porque la oposición le negó sus votos para que ingresen a sesión en reserva para tratar el tema.
En 2002, el entonces presidente de Venezuela Hugo Chávez denunció un supuesto golpe de Estado; 48 horas después los mismos uniformados le devolvieron el poder. López explicó que esto fue aprovechado por el entonces gobernante de ese país para purgar las FFAA y hacer reformas legales para tener el control total de esa institución.
“Es en la época, entre 2005 en adelante, cuando la asesoría cubana inicia con fuerza en Venezuela. A partir de eso se han hecho por lo menos cinco reformas a las Fuerzas Armadas y se incorporan milicias y en algunos regulaciones también se incorporan civiles”, indicó.
La experta rememoró que el exmandatario venezolano, justificándose en el “golpe de Estado”, dejó fuera a varias promociones de militares. Este hecho pasó a lo largo de toda su gestión hasta tener una institución castrense-política y que operó como un brazo operador de su administración, según la analista.
“Con el golpe de Estado, él (Chávez) justificó purgar de los altos mandos militares, a lo largo de su gobierno fue depurando a miembros de las Fuerzas Armadas. Después los altos mandos fueron enviados a Cuba para adoctrinamiento y también hay una serie de reformas para ver como se estructura y organizan los militares, que siguen el patrón cubano”, indicó.
¿Qué pasa en Bolivia?
En 2020 la expresidenta del Senado Eva Copa planteó un recurso para frenar los ascensos de militares durante el gobierno de transición. Este año salió la sentencia constitucional 0026/2021, en respuesta a ese amparo, que insta al Legislativo a elaborar una Ley de Ascensos en las FFAA.
Los oficialistas, como la parlamentaria Lindaura Rasguido, en los debates para la aprobación de la normativa dijeron que el precepto respondía a evitar que los militares den otro “golpe de Estado”. Argumentó que la normativa “ordenará” la institución castrense para evitar ascensos mediante decretos.
La Comisión de Seguridad del Estado, Fuerzas Armadas y Policía Boliviana de la Cámara Alta planteó una resolución camaral para dejar fue de los ascensos a las promociones de 1987 y 1988, y promover a una parte de los graduados de 1989, luego de una nueva calificación, y de 1990.
Los último no pudo ser concretado, puesto que la oposición no dio su voto y se llegue a declarar sesión en reserva para tratar estos temas. En ese sentido esto quedó postergado hasta una próxima plenaria que será en enero de la próxima gestión.
También durante este año, Simón Amaru, representante de la Coordinadora Nacional de la Defensa de la Democracia afín al MAS, pidió reformar la Constitución para crear milicias armadas con el fin de defender el “proceso de cambio” y al Gobierno de Luis Arce.
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