El líder de la Resistencia Juvenil Cochala (RJC) Yassir Molina fue trasladado la noche de este viernes del penal de Cantumarca a la cárcel de San Pedro de la ciudad de Oruro, tras que en pasadas horas se hayan reportado protestas de internos por denuncias de extorsión.

La decisión fue asumida por un juez de ejecución penal de la Villa Imperial, en una audiencia bajo solicitud de la Dirección del Régimen Penitenciario de ese departamento, informó el diario Correo del Sur.

“De acuerdo con la información que recibí de Régimen Penitenciario de Potosí y de los fiscales, Yassir Molina y otros cuatro reclusos procedían a extorsionar a los internos nuevos que llegaban a su pabellón, incluso procedieron a golpear a un recluso”, informó el fiscal departamental de Chuquisaca, Mauricio Nava.

La protesta de los internos del penal potosino fue para exigir el traslado de cinco miembros de la RJC, entre ellos Molina, quien se encuentra cumpliendo detención preventiva desde septiembre.

Régimen Penitenciario afirmó en la audiencia que Molina y sus compañeros de celda no solo extorsionaban sino también amenazaban a los delegados de otros pabellones y a los familiares de esos reclusos, lo que provocó la renuncia de estos delegados.

Inicialmente había la intensión de que sea trasladado a La Paz pero las autoridades penitenciarias recibieron información de que había amenazas de un posible atentado en contra de su vida por lo que se decidió su traslado a un penal de Oruro.

La madre del líder de la RJC, Daniela Hidalgo, expresó su preocupación por la situación de su hijo y cuestionó las acusaciones mientras se encontraba en aislamiento en el penal.

Los integrantes de la RJC guardan detención preventiva acusados de haber protagonizado destrozos en 2020 en la Fiscalía General del Estado, con sede en la ciudad de Sucre, exigiendo la destitución del fiscal General, Juan Lanchipa.