El exministro Yerko Núñez consideró que la expresidenta Jeanine Añez se encuentra en la cárcel debido a la ira del exmandatario Evo Morales y porque tuvo la osadía de ocupar el cargo en el que el masista pretendía permanecer de por vida y de manera inconstitucional.

“Considero que lo que causó más irá a Morales es que Añez tuvo la osadía de ocupar constitucionalmente la Presidencia que el dictador socialista quería de por vida e inconstitucionalmente”, dijo el extitular de la Presidencia durante la administración de Añez, en una entrevista que concedió a Página Siete desde la clandestinidad y que este lunes se publicará en extenso en la edición impresa.

Desde hace medio año la exgobernante se encuentra recluida en el penal de Miraflores de La Paz procesada en el caso de supuesto “golpe de Estado” contra Morales, quien renunció a la presidencia el 10 de noviembre de 2019 y generó un vacío de poder que fue llenado por la expresidenta mediante un mecanismo excepcional sobre el que aún se debate.

A diferencia de Núñez, las autoridades del gobierno y los dirigentes del Movimiento al Socialismo (MAS) aseguran que Añez está detenida para hacer justicia por las víctimas de Senkata y Sacaba, fallecidas justamente durante las revueltas que se originaron tras las denuncias de fraude electoral y posterior renuncia de Morales.

El exministro de la Presidencia de la gestión transitoria, quien se pronuncia algunas veces mediante las redes sociales, señaló que las las muertes en El Alto y Cochabamba ocurrieron por el “apetito personal” de Morales , quien quería volver al gobierno luego de renunciar y “huir” del país.

“Añez no está recluida por los hechos de Senkata y Sacaba sino por delitos inventados por el cobarde Evo Morales y una justicia que está a su servicio. A Evo Morales no le importan los ciudadanos que murieron a causa de su apetito por el poder, sólo le importa su orgullo herido de dictador para aplastar a una mujer valiente y vulnerar su dignidad para lavarse la cara”, afirmó.

Asimismo, la exautoridad cuestionó el hecho de que colaboradores del fraude electoral estén libres ahora y ocupen cargos públicos. Recordó que en la oficinas del Ministerio de Justicia, cuando estaba a cargo del actual embajador de Bolivia ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Héctor Arce, se manipuló material electoral en 2019.