Sin medir riesgos, centenares de campesinos del trópico de Cochabamba llegaron hasta Villa Tunari para asistir a XXVI Congreso Ordinario de la Federación Especial de Trabajadores Campesinos del Trópico de Cochabamba, con Evo Morales como invitado especial.

De acuerdo con los reportes de los medios locales, los asistentes suman unos 1.500 y fueron concentrados en el coliseo de Villa Tunari y estarán presentes hasta el domingo cuando se prevé la clausura del evento. En las tomas gráficas se puede observar a muchos asistentes sin respetar el debido distanciamiento físico, y en algunos casos, sin el uso adecuado del barbijo.

Este encuentro se produce cuando Cochabamba vive la peor fase de la pandemia del coronavirus con 867 casos en promedio durante la última semana, 21 fallecidos cada día, 2.018 muertos en total y 46.692 casos de Covid hasta el jueves 27 de mayo.

El Comité de Operaciones de Emergencia Departamental (COED) determinó que los centros de eventos sean utilizados al 50 % de su capacidad, sin embargo, el coliseo de Villa Tunari se vio abarrotado de dirigentes campesinos de todas las comunidades del departamento.

El congreso campesino tiene planificado el cambio de dirigentes. En su mensaje el presidente de las seis federaciones del trópico de Cochabamba, Evo Morales, dijo que este evento debía realizarse el año pasado, pero por la pandemia fue postergado.

Morales aprovechó para fustigar a la industria farmacéutica y la venta de las vacunas para la pandemia, señalando que los grandes laboratorios deberían estar en manos del Estado o de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para proveer las vacunas a todo el mundo. En ese marco demandó de sus compañeros plantear este debate en el congreso.