La ministra de la Presidencia Marianela Prada descartó que el gobierno determine una cuarentena rígida en el país, pese a que en algunas regiones los gobiernos locales endurecieron las restricciones ante la crecida de casos de COVID-19, y enfatizó que de acuerdo a la realidad del país no se puede tomar una decisión que vaya en perjuicio de la economía de la población.

“Cada país, cada realidad es distinta, nosotros no podemos tomar medidas que estén alejadas de la realidad económica, social, cultural de nuestra población”, señaló la autoridad en conferencia de prensa.

En criterio de Prada, la medida adoptada en la gestión pasada por el gobierno de transición afectó considerablemente a la economía de la población que, pese al encierro, contrajo la pandemia y tuvo que recurrir al uso de la medicina tradicional para paliar los efectos de la enfermedad.

“El año pasado no solamente que aumentó el hambre, aumentó la pobreza, aumentaron las desigualdades económicas y sociales y nosotros sabemos porque caminamos el año pasado por toda Bolivia con el hermano presidente (Luis Arce para conocer) cuáles son las necesidades, qué es lo que le preocupa en este momento al pueblo boliviano y (coincidimos en) que tiene que ver fundamentalmente con el tema de la reconstrucción de nuestra economía”, sostuvo la autoridad.

En ese sentido, la Ministra de la Presidencia descartó que se declare cuarentena rígida desde el gobierno central.

Señaló que hasta la fecha el Presidente y el vicepresidente David Choquehuanca no fueron inmunizados porque le están dando prioridad al plan de vacunación a la población boliviana.

“Nuestros hermanos Presidente y Vicepresidente aún no se han vacunado, ellos —como lo han señalado públicamente— están atentos también a la evolución de este plan de vacunación (y) han decidido que se priorice a la población boliviana que lo necesita. Y dentro del marco del cumplimiento del plan de vacunación, estamos atentos a que ellos también puedan acceder a la vacuna”, señaló.