Ocurrió hace algunos días en la ciudad de Sucre, un nieto tocó el rostro de su abuelita fallecida por covid19, como señal del último adiós, posteriormente, al tener contacto contagió a toda su familia, incluso niños; declaró, Douglas Martinez, responsable del área de Promoción de la Salud del SEDES. El ejemplo demuestra que un cadáver covid, tiene la capacidad suficiente para contagiar, aseveró, mencionó que existen varios casos de familiares equivocadamente se acercan a sus difuntos sin las medidas de protección.