La Sala Plena del Tribunal Supremo Electoral (TSE) se abrió a debatir el tema del empadronamiento de nuevos electores. Los vocales analizan los mecanismos por las cuales se puede garantizar el derecho a la votación de todos los ciudadanos que cumplan la mayoría de edad hasta el día de la elección.

“Sobre los mayores de 18 años estamos revisando, en el marco de nuestras atribuciones constitucionales, la posibilidad de poner en primer lugar la garantía de su derecho a votar. Esa es nuestras obligaciones, entonces estamos analizando las condiciones que nos permiten esto, sin romper el principio de preclusión”, manifestó la vocal Rosario Baptista en un contacto con radio Panamericana.

La autoridad electoral indicó que además de analizar las vías por las cuales se permitiría la votación de estos jóvenes que quedaron al margen del empadronamiento, también analizan el escenario en que se produciría el registro. Enfatizó que se debe tener en cuenta que no se puede convocar a la concentración de personas y que el empadronamiento requiere de la presencia física de las personas por su huella digital y fotografía.

Hace dos días, el presidente del TSE, Salvador Romero, descartó la posibilidad de abrir otra etapa para empadronar a nuevos electores enfatizó que “todas las actividades que se realizaron entre el 5 de enero y el 20 de marzo, que es cuando se suspendió el calendario electoral, están concluidas”.

Romero fundamentó su respuesta en la Ley 1297, de postergación de las Elecciones Generales 2020, que en su artículo 4 establece que bajo el principio de preclusión “todas las actividades del calendario electoral ya realizadas y cumplidas hasta el viernes 20 de marzo, no podrán ser revisadas ni repetidas”. El empadronamiento de ciudadanos fue una actividad que concluyó el 26 de enero.

La pasada semana el diputado Erick Morón presentó una demanda de inconstitucionalidad contra la Ley 1297 porque bajo el principio de preclusión se vulneraría el derecho al sufragio de más de 100 mil nuevos electores que cumplen la mayoría de edad hasta el día de las elecciones.

Baptista expresó su preocupación e indicó esta elección implica consigo un riesgo de exclusión de determinados grupos. Además de los que quedaron fuera del empadronamiento existe la posibilidad de que se genere un ausentismo de los adultos mayores, embarazadas o personas con enfermedades de base que prefieran no acudir a lugares concurridos.